El regreso del primer ministro haitiano Alix Didier Fils-Aimé a Puerto Príncipe, planeado con una puesta en escena espectacular, genera interrogantes. Aunque su viaje a Estados Unidos incluyó reuniones con algunos diplomáticos, la falta de apoyo concreto de Washington es preocupante.
No se ha anunciado ningún plan de ayuda ni reconocimiento oficial de su gobierno, lo que sugiere una falta de interés en la situación de Haití.
Mientras la población enfrenta una creciente inseguridad y una grave crisis humanitaria, las festividades en torno a su regreso parecen vacías de sentido.
Los tambores de rara no compensarán la ausencia de un apoyo tangible.
En lugar de un espectáculo, Haití necesita acciones significativas para superar sus desafíos.
📲 No te pierdas nada con Hebdo24
Recibe nuestras últimas noticias directamente
en tu teléfono a través de nuestro canal oficial de WhatsApp.
Unirse al canal de WhatsApp Hebdo24
Discussion about this post